domingo, 27 de diciembre de 2015

UNO MUY, MUY, MUY VIEJO

EL MAS VIEJO QUE SUBE A LOS ARENALES
A veces, por ser tan insistentes, se encuentran caminos tan antíguos que te sorprenden grátamente. Como es posible que se conserven después del paso de tantos años (quizás más de 150 años). Hoy ha sido uno de esos días en los que tienes la certeza que por allí debe de pasar un camino viejo y después de marearte dando vueltas das con algo muy, muy, muy viejo. Se conservan en buenas condiciones muy pocos de estos "que 
sepamos" y aunque no lo hayamos recorrido entero por falta de tiempo, algún día volveremos para plasmarlo en nuestro disco duro. Desde la Iruela hasta el puerto de los arenales sube un camino viejo precioso, intentábamos unir esta zona con la casa forestal del Sagreo (sin pisar el GR que parece que es una unión más artificial). En ese barranco hay un camino intermedio muy, muy,muy viejo que estamos seguros que une estos puntos y el día que lo andemos dejaremos constancia de él.











domingo, 13 de diciembre de 2015

LOS CAMINOS PERDIDOS A LOS POYOS DE LA MESA

CIRCULAR: NAVA DEL ESPINO, CAÑÁ DE LA MEDIA ANEGA, COLLADO DE LOS PEGUEROS, POYOS DE LA MESA, NAVA DEL ESPINO.
Buenas Tardes, al igual que en toda la sierra, la cantidad y variedad de caminos que suben a los POYOS es impresionante; pero sólo dos de ellos son senderos de herradura de principios del siglo pasado. El primero y principal sube desde la Nava del Espino y te lleva al inicio de la gran meseta y el segundo llega desde muy lejos, desde el antíguo camino de la Canaliega y el recorrido de este último es impresionante..., antes de llegar a su destino final nos encontramos dos ramales que se pierden en un collado anterior donde unas increíbles vistas nos llevan desde el barranco del coberteron, pasando por el tranco del lobo, hasta el calar de Juana (no me extraña que el camino fuera abandonado sin terminarlo) y el segundo que también se pierde llega hasta el collado de los pegueros. Un km antes de llegar a este collado sube el segundo que te lleva directamente al final de la meseta, unos metros antes de la bajada al vado de los perrillos. Un galimatías de caminos tan escondidos como bonitos de andar. Un abrazo.